[ad_1]
El año en 9
Si! Este año es hermoso y está bien ubicado bajo el signo de místico y consciente número 9. Símbolo del conocimiento, la espiritualidad y la compasión, lo nuevo nos empuja a tener una reflexión seria sobre el sentido de la vida, a redefinir nuestras prioridades y asumir nuestros valores.
El año 2016 abre una nueva dimensión a nuestra existencia. "Ser auténtico y desinteresado" es nuestro mantra. No hay más espacio para fingir, y hay que decir que, en cualquier caso, ya ni siquiera lo queríamos.
Lo nuevo nos ayuda a darnos cuenta de que el mundo debe ser más justo y que todos tenemos la fuerza dentro de nosotros para contribuir a este grandioso proyecto. Nos sentimos creciendo psíquicamente, nos damos cuenta de que somos "capaces de", queremos dar de nosotros mismos para los demás.
Ahora es el momento de la transformación final y bien preparado. Sabemos lo que queremos, sabemos lo que ya no queremos. Nuestros objetivos se vuelven más claros y nuestros sentidos se agudizan. ¡La fuerza está en cada uno de nosotros!
& No olvides que el 9 termina todo lo que comenzó con las cifras anteriores … Después de este año, el círculo estará completo y comenzaremos uno nuevo.
El espíritu divino
El año 2016 lleva consigo la energía del idealismo profundo y la compasión sin límites. Los valores espirituales sacudieron el año del 9. Finalmente estamos listos para pasar todo nuestro tiempo realizando nuestros sueños utópicos: el dinero está perdiendo su valor, el tiempo se toma lo suficiente y la energía en el aire es profundamente positiva. Es al dar que estamos satisfechos. Los placeres primarios se vuelven secundarios. Nos preguntamos "¿por qué? Como? " Mejoramos, nos liberamos, nos abrimos.
Nuestra intuición está muy desarrollada y nuestra atracción por lo espiritual crece día a día. Nos damos cuenta de las necesidades de nuestra mente y las maravillas que nos rodean.
Ver grande
Prestamos menos atención a los pequeños detalles sin importancia. Este año, nos vemos grandes, lejos, grandes. Abrimos nuestra mente, dejamos ir los prejuicios. No tenemos más tiempo para dedicar a un comportamiento vil e inútil. Nos volvemos imaginativos, creativos, nos sentimos capaces de revelar los potenciales de nuestro entorno.
Atención, porque esta forma de pensar es de doble filo! Es muy difícil para nosotros aceptar las imperfecciones de este mundo y de nosotros mismos. Sería muy fácil permanecer en la negación. Además, esta necesidad de pensar en grande puede empujarnos a nunca relajar nuestros esfuerzos y continuar haciendo nuestras mejores creaciones, incluso si eso significa no escucharnos a nosotros mismos.
Es necesario encontrar el medio feliz y aceptar los límites naturales de uno, así como los de los demás, mientras se muerde la vida al máximo. 2016 nos invita a encontrar el equilibrio.
Entusiasmo y sacrificio
Este año estaremos encantados de contribuir a nuestra propia felicidad y la de los demás y finalmente aceptamos la necesidad de sacrificio.
El 9 nos invita a compartir, a sacrificarnos por un objetivo mayor, y sobre todo, nos lleva a no esperar nada a cambio.
Cuanto más demos de pura generosidad, más recibiremos. Las lecciones que hemos aprendido en los últimos años serán útiles en 2016. Somos verdaderos, honestos y honestos. Una fuerza positiva nos deposita en la montaña de la felicidad y nuestro altruismo nos impulsa a la cima.
Armonía, naturaleza y amor.
Quien no está en armonía consigo mismo y quien está demasiado concentrado en sí mismo estará bajo el control de las llamas de 2016. Es fácil culpar a otros por sus problemas, ser malo o desagradable, pero ¿qué? no es el espíritu del año 2016. Es necesario aceptar tu personalidad y arreglártelas dando lo mejor de ti mismo. Recuerde que cada defecto tiene una calidad asociada, y viceversa … Aproveche las cosas para su beneficio y el de los demás también.
La clave es ser honesto contigo mismo y encuentra tu propio equilibrio. El año del 9 nos ofrece la oportunidad de amar sin contar, de comprendernos mejor y desarrollarnos plenamente.
[ad_2]